Promoción interna. Cómo sacar el máximo provecho a tu proceso de evaluación

Si quieres gestionar bien tu carrera profesional es clave saber desenvolverse en los procesos de evaluación pues estos son determinantes en muchas organizaciones, como los despachos de abogados, para decidir las promociones. En esta columna encontrarás consejos para abordar con éxito tus evaluaciones y algunas claves para saber adaptarte a la cultura de feedback continuo que se están implantando en todo tipo de organizaciones.

A los abogados senior les incomoda decir a un abogado junior lo que tiene que mejorar y el abogado junior no siente la suficiente confianza como para reconocer sus errores delante de un abogado senior. Llegué a estas dos conclusiones desarrollando un proyecto de digitalización del proceso de evaluación de una organización del sector legal y me hizo ver cual era el verdadero reto a la hora de implantar un proceso de evaluación: la generación de confianza en los equipos.

Trabajes en la organización que trabajes, despacho de abogados, asesoría jurídica de empresas, administración pública, legaltech, … e independientemente de lo sofisticado o simple que sea el sistema de evaluación, si no hay confianza entre los miembros de un equipo, el sistema no funcionará.

¿Y qué puede hacer quién está empezando?

Si estás empezando a trabajar o estás a punto de empezar debes tener muy claro que la carrera profesional es aprendizaje continuo en la que conocer el feedback de las personas que están a tu alrededor es clave para poder avanzar y por tanto es responsabilidad tuya buscarlo.

Es muy probable que te encuentres con que muchas organizaciones tengan ya establecidos sistemas de evaluación. Los más habituales son aquellos en los que a partir de una plantilla se te evalúe por parte de tu responsable y aunque estos procesos están en vías de desaparición indico a continuación 5 consejos para poder sacarles el máximo aprovechamiento:

• Auto evaluación sincera. Antes de someterte a un proceso de evaluación es importante que primero te auto evalúes con la mayor honestidad posible. Para saber si estás siendo bien o mal evaluado o evaluada es necesario que sepas cuales son tus fortalezas y tus debilidades y como estas te pueden afectar a tu desempeño. Esta información puedes o no compartirla con quién te vaya a evaluar, hay procesos que requieren hacer esta auto evaluación como primer paso, si no fuera el caso puedes hacerla tu mismo. Tener bien desarrollada la capacidad de autocrítica es clave, pero no se trata ni de engañarse ni de auto flagelarse.

• Identificar retos de futuro y objetivos, realistas. Puede que donde vayas a trabajar exista un plan de carrera que establezca qué responsabilidades y objetivos debes alcanzar en cada etapa de la carrera. Si este fuera el caso mi consejo es que estudies bien ese plan de carrera, suele ser públicos, para así tener una referencia de lo que se esperará de ti. En el caso de que no haya un plan de carrera puedes marcarte tus propios retos, pero para ello primero debes conocer bien la organización o tu departamento y lo que hace cada componente para que en función de ello puedas marcarte metas. Estas metas y objetivos a futuro son convenientes acordarlos en la evaluación con la persona que sea tu responsable, pues tenerlos fijados te ayudará para poner foco en tu día a día y tener un horizonte.

• Ficha de evaluación, bien preparada. La ficha de evaluación suele ser el documento donde se plasma la valoración que te harán tus responsables. Estos documentos suelen incluir al menos una parte para evaluar tus competencias y otra para valorar el nivel de los objetivos que te hayan asignado el periodo que se esté evaluando y para fijar los nuevos para el próximo ejercicio. En lo que respecta a las competencias es importante que te familiarices con ellas cuanto antes y que las asocies a comportamientos que realizas en tu trabajo (por ejemplo: proactividad con acciones que hayas iniciado sin pedírtelo nadie, creatividad con soluciones imaginativas que hayas ideado para resolver algún problema o versatilidad con tareas muy diferentes que te haya tocado hacer o proyectos en los que has trabajado con equipos diferentes). En cuanto a los objetivos que te planteen o plantees, deben ser estimulantes, alineados con el propósito de tu equipo y/o organización y además medibles y realistas.

• Entrevista, bien aprovechada. La entrevista de evaluación suelen venir determinada por el contenido de la ficha de evaluación, es decir que si en la ficha se valoran competencias y objetivos es de esto de lo que se hablará en la entrevista. Si te evalúan sin una ficha predeterminada intenta que la entrevista esté un poco estructurada. Debes tener presente que no a todo el mundo se le da bien evaluar por eso es importante que al menos de tu parte las entrevista la lleves bien preparada, teniendo claro la información que quieres conocer para tu desarrollo profesional: ¿qué estoy haciendo bien y qué no?, ¿qué se espera de mi en el próximo año?, ¿qué debo reforzar?, ¿cuál puede ser mi carrera a metido plazo?, ¿qué tengo qué hacer para conseguir promocionar o para asumir más responsabilidades?, … Si quién te evalúa lo hace bien es muy probable que te de respuesta a esta y otras preguntas y si no lo hace, entonces se tu quien tenga la iniciativa y propónselas.

• Tener otros puntos de vista, asegura la objetividad. Existen procesos de evaluación que permiten sumar la opinión de terceras personas a la del responsable directo. Si esta opción no la tienes o no hay un proceso de evaluación, no dejes de buscar opciones de terceros pues cuántos más puntos de vista tengas más posibilidades tendrás de disponer de información objetiva sobre tus progresos.

El feedback adecuado es un regalo que podemos recibir …  pero también dar

Desde hace unos años y aprovechando la digitalización de los procesos internos de las organizaciones, se están abandonando este esquema de evaluación top-down para pasar a implantar lo que se denomina procesos de evaluación continua, en los que todos los miembros de una organización son evaluados constantemente por las personas con las que va interactuando, ya sean compañeros, subordinados, superiores jerárquicos o incluso clientes o externos. En el fondo no es nada diferente a lo que ya hacemos en redes sociales o como consumidores en diferentes ámbitos como ocio y vacaciones con aplicaciones como Tripadvisor o en el transporte urbano con Uber ó Cabify.

Para sacar el máximo provecho de estos nuevos procesos es necesario que en las organizaciones exista previamente una cultura de transparencia, tolerancia al error y confianza. Desafortunadamente estos aspectos no son frecuentes en las organizaciones más tradicionales del sector legal pero a pesar de ello os animo a que vosotros lo practiquéis, empezando por buscar siempre el feedback de terceros y también ofreciendo el vuestro a quién pueda interesarle.