Primeros pasos como Abogado de Empresa. Por Javier Pérez Puente

Dentro de los muchos perfiles de abogados que existen y de carreras profesionales que se pueden seguir como profesional del Derecho, un perfil muy tradicional es el del abogado que empieza su carrera en un despacho de abogados para posteriormente prestar sus servicios internamente en el departamento legal de una empresa. No obstante, es cada vez más común el perfil del abogado junior que decide comenzar su carrera como abogado “in-house” (o interno) en la asesoría jurídica de una empresa.

Esto se debe principalmente a la tendencia de las empresas a internalizar sus servicios jurídicos y de contratar talento joven y no únicamente perfiles más senior. Cada vez más, las empresas apuestan por la formación de sus propios abogados, ofreciéndoles un plan de carrera atractivo desde sus comienzos profesionales y sin pasar por alto la retribución y conciliación. Esta alternativa, sin lugar a dudas, está provocando que cada vez más abogados jóvenes opten por no pasar por un despacho de abogados o, en caso de tener que hacerlo, que sea por el tiempo mínimo indispensable para poder dar el salto a la empresa.

Veamos en este artículo las ventajas de desarrollar tu carrera desde un inicio como abogado de empresa y el perfil que éstas buscan incorporar.

Ventajas de trabajar como abogado de empresa

• Flexibilidad y conciliación. Por lo general, las empresas ofrecen una mayor flexibilidad a sus trabajadores y, en su mayoría, la posibilidad de teletrabajar dos o tres días de media por semana. Siempre salvando las excepciones, el principal motivo que provoca el movimiento de un abogado de un despacho de primer nivel a una empresa es la conciliación que esta segunda ofrece, ya que, como es bien sabido, el horario y la carga de trabajo es por lo general más estable.
• Desarrollo profesional. Un aspecto siempre atractivo de trabajar en una empresa es el plan de carrera, el cual en algunas ocasiones puede suponer trabajar en otro departamento. No tiene por qué ser una función fuera de la asesoría jurídica (siempre puede haber movimientos internos), aunque, si se quiere, siempre puede intentar desarrollarse en otras áreas o departamentos con los que se haya trabajado previamente y sobre los que los conocimientos que hayamos adquirido en la empresa puedan sernos útiles. Por ejemplo, es habitual que un miembro de la asesoría jurídica se traslade a un departamento de Compliance (y viceversa), o incluso que termine desarrollando funciones más propias del negocio en sí que legales. Lo importante es, a la vez que aumentamos nuestros conocimientos jurídicos, ir teniendo una visión cada vez más amplia sobre el funcionamiento de la empresa, sus departamentos, procesos y todo su entramado.
• Oportunidades internacionales. Normalmente, si la empresa tiene sede en más de un país, puede ofrecer a sus empleados intercambios en el extranjero, lo que es una gran oportunidad para reforzar un idioma, hacer networking y dar un salto en tu carrera.
• Programas de formación. Cada vez es más frecuente que las empresas cuenten con programas de formación para recién graduados. Normalmente se tratan de prácticas remuneradas en las cuales se va rotando por las distintas áreas de la asesoría jurídica y que a su conclusión pueden suponer la contratación. En cualquier caso, esta primera experiencia profesional es un vehículo excelente para abrir las puertas a otras oportunidades laborales.

Habilidades que debe reunir el abogado in-house

• Habilidades de comunicación, dada su relación continua con otros departamentos, instituciones, despachos de abogados, etc.
• Orientación al cliente, con énfasis en las necesidades del negocio para poder dar un asesoramiento integral y diferencial.
• Habilidades de negociación, debiendo representar los intereses de la empresa y siendo conciso y persuasivo a la hora de negociar un contrato.
• Perfil multidisciplinar, teniendo conocimientos legales muy amplios sobre una gran variedad de cuestiones jurídicas relevantes para la actividad de la empresa.

Consejos para un proceso de selección

Centrándonos en un perfil junior, conviene tener en cuenta lo siguiente:

• Es importante cursar el Máster de Acceso a la Abogacía (o si el puesto es para prácticas, estar cursándolo). Aunque existe la creencia de que no es necesario estar colegiado si no se va a acudir a Sala, en muchas asesorías jurídicas es obligatorio estar colegiado. Además, si puedes compaginar tu Máster de Acceso con otro en asesoría jurídica de empresas o centrado en derecho mercantil, mejor que mejor.
• Si bien la empresa no espera que tengas conocimientos jurídicos muy amplios (lo cual es lógico dada la experiencia que se requiere para un puesto junior), siempre es conveniente que de cara al proceso de selección te informes bien sobre todas las actividades que lleva a cabo la empresa y tener una idea sobre la normativa que puedes necesitar saber en el desempeño de tus funciones (sector bancario, energía, seguros… cada sector tiene una normativa específica, así que puede ser útil hacer un estudio previo para hacerse una idea general).
• Fíjate bien en la descripción del puesto de trabajo y en el perfil que necesitan. Aunque parezca obvio, la descripción del puesto puede darte muchas pistas para hacer un estudio previo y preparar el proceso. Incluso puedes adaptar tu currículum para reflejar las habilidades de la oferta.
• Dadas las particularidades de cada empresa, es previsiblemente difícil a estas alturas de tu carrera contar con una experiencia específica previa, aunque es conveniente intentar extrapolar experiencias laborales previas (o incluso durante la carrera) que puedan encajar con el puesto (por ejemplo: revisión y redacción de documentos contractuales, análisis de legislación, etc.)
• Inglés. Parece obvio, pero a veces se tiende a pensar (equivocadamente) que como la empresa se encuentra en España no va a necesitarse saber inglés. Aunque puede que en tu día a día no lo utilices, tener un buen nivel de inglés es un must para cualquier abogado, nunca sabes cuándo lo vas a poder necesitar.
• En cuanto a las soft skills, no las pases por alto, menos aún para un puesto junior (aquí la descripción del puesto también puede ayudarte). Habilidades como el trabajo en equipo, la negociación y la atención al detalle son siempre bien valoradas por las empresas, y más aún si tienes la oportunidad de ejemplarizar cada una de ellas con alguna experiencia previa.

Conclusión

Si estás dando tus primeros pasos en el mundo de la abogacía y te gusta el derecho mercantil y el mundo de la empresa, trabajar en una asesoría jurídica puede ser una opción muy interesante para dar comienzo a tu carrera profesional. Sobra decir que los primeros años como profesional son más bien una toma de contacto y de prueba y error, siempre estás a tiempo de redirigir tu trayectoria y más aún en los primeros años de ejercicio.