Entrevista Miguel María García Caba, vicesecretario general de la Real Federación Española de Fútbol

Miguel María García Caba es uno de los abogados referentes en derecho deportivo en España. Actualmente Vicesecretario General de la Real Federación Española de Fútbol. Miembro, Comité Control, Ética y Disciplina de la UEFA. Miembro de la Comisión Jurídica y RSC del COE. Académico Correspondiente a la Real Academia de la Jurisprudencia y Legislación y profesor de Derecho Administrativo en la Universidad Carlos III de Madrid

• ¿Cómo recuerda sus inicios profesionales? ¿Decidió desde el principio que le interesaba el área de derecho deportivo? ¿Cómo fue su historia vital hasta acabar en esta especialidad?

Con mucha nostalgia e ilusión. Mis inicios profesionales se sitúan en un despacho franco español, nada más concluir los estudios de la Licenciatura en Derecho Jurídico-Comunitario en la San Pablo-CEU y cursar un Diploma de Altos Estudios Europeos en la Universidad Paris 1 Panthéon-Sorbonne.

Mi interés por el área del derecho deportivo surgió por el intento de unir dos de las grandes pasiones de mi vida, el deporte y el derecho. Me considero jurista y “deportista”, tanto de formación como de vocación y siempre quise que mi actividad docente, investigadora y profesional se desarrollara en el ámbito del deporte.

Por aventuras del destino o del azar y debido a mi pasión por el deporte, que mis superiores del despacho conocían de primera mano, comencé a colaborar en temasrelacionados con el deporte y el derecho. y comencé a ver la oportunidad y posibilidad de unir ambas materias, por lo que comencé a investigar qué posible formación académica podía haber en esa área.

Sin embargo, cuando acabe la carrera, a finales de los noventa, no había prácticamente nada a nivel de especialización en derecho deportivo, salvo un Máster en la Universidad de Lérida. De esta forma me matriculé en el Máster y puedo confesar que en el primer minuto de la primera clase descubrí que esto era mi vocación, que era algo que me encantaba, que me apasionaba y que quería que mi futuro profesional y académico discurriera por este área. Tras finalizar el Máster obtuve la beca de estudios que daba la Liga Nacional de Fútbol Profesional al mejor alumno de la promoción y, pude realizar unas prácticas en La Liga Nacional de Futbol Profesional.

Ya entonces había dejado el despacho y trabajaba como abogado de la asesoría jurídica y de la secretaria del consejo de administración de una empresa del Ibex 35, Red Eléctrica de España, S.A. Al terminar las prácticas en LaLiga pude compaginar mi actividad en la empresa eléctrica con mi labor de asesor jurídico externo del futbol profesional español y a partir de ahí, tuve una relación mucho más directa con el mundo del deporte.

Llegó un momento en el que era difícil de compatibilizar la labor de Red Eléctrica y de LaLiga y me quedé en LaLiga. Tras casi doce años tuve el privilegio de ejercer la jefatura del departamento de los servicios jurídicos del Real Madrid, y ahí estuve casi 2 años hasta que me llegó la oportunidad de incorporarme a la Real Federación Española de Futbol, en la nueva etapa que empezaba tras la elección del presidente Luis Rubiales. Comencé como director de la asesoría jurídica y, en la actualidad soy vicesecretario general y el director de integridad. También formo parte del Comité de Control, Disciplina y Ética  de la UEFA.

• ¿Cómo describiría su día a día? ¿Cuáles son las principales tareas o proyectos que lidera como responsable de la asesoría jurídica de una entidad como la Real Federación Española de Fútbol?

El derecho del deporte es una materia muy transversal y horizontal, es verdad que tiene partes específicas de reglamentación deportiva nacional e internacional; es decir, tenemos que conocer las normas y reglamentaciones de la FIFA y de la UEFA, por un lado y, por otro lado, desde la RFEF tenemos la potestad de ordenanza y reglamentaciones del futbol a nivel nacional, por lo que es preciso estar muy familiarizado con los estatutos, reglamentos, normas de juego y las bases de cada competición; pero esto debe interpretarse y convivir junto con la normativa de derecho administrativo, derecho mercantil, derecho laboral, derecho civil e incluso con el derecho penal.

Se trata de una materia en la que tienes que contar con una visión multidisciplinar, de diferentes áreas de conocimiento jurídicas y luego extrapolarla a la especificidad del deporte, lo cual muchas veces no es sencillo y puede conllevar múltiples conflictos.

En el deporte y, especialmente en España conviven dos ordenamientos sobre el fenómeno deportivo, el “privado” deportivo y el “público” deportivo y no propiamente deportivo, que tienen que confluir y actuar en armonía, lo cual no siempre es posible. Es una materia apasionante y agradecida pero también compleja, que al principio al primer acercamiento puede ser difícil porque no sólo devienen aplicables las normas deportivas federativas, sino que hay que vincularlas a todo lo que es un ordenamiento constitucional, europeo y nacional.

En particular, el día a día de un jurista relacionado con el deporte es apasionante. Consiste en asesorar a todos los órganos de gobierno de cada entidad, sea club, deportista, federación o liga. Desde revisar contratos mercantiles, civiles, laborales, a redactar escritos para tribunales y órganos administrativos o internacionales, elaborar estatutos y reglamentos, tener relación con otras federaciones nacionales para aplicar normas, o tener que acudir a reuniones en la FIFA o en la UEFA. También tiene mucha interacción con las administraciones públicas estatales, principalmente, pero también autonómicas y locales, mucha interacción con las ligas profesionales, con los clubes con los jugadores, con los agentes. Lo más interesante de tener el privilegio de trabajar en una federación es que abarcas todo el deporte; lo profesional, lo aficionado, los árbitros, los entrenadores, los jugadores, los clubes profesionales y no profesionales, abarcas todas las federaciones territoriales de España, tiene mucho de interacción entre todos los actores y no solo en relación con el fútbol campo, la modalidad principal, sino con especialidades como el fútbol sala, el fútbol playa o el fútbol en silla de ruedas.

• El derecho deportivo, como especialidad transversal y de un sector, -y no área del derecho-, engloba un conocimiento de varias disciplinas jurídicas ¿Qué opina de la creciente necesidad de abogados especializados en sectores económicos? 

El deporte es cierto que ha crecido en los últimos años a nivel de relevancia económica y social, y he tenido el privilegio y el honor de vivir esa profesionalización. En los últimos años he visto cómo se profesionalizaban todas las áreas deportivas, económicas, jurídicas y de gestión de clubes, federaciones, ligas, instituciones internacionales, donde hay profesionales muy buenos en todas las áreas. Hemos avanzado muchísimo como sector relevante desde el punto de vista económico y nos estamos asemejando a lo que puede ser otros sectores “clásicos” como puede ser el financiero, el sanitario, el inmobiliario o el energético, donde también he tenido el privilegio de trabajar muchos años.

La profesionalización del deporte ha sido un poco más tardía, pero sí que lo compararía con cualquier sector económico relevante a la fecha actual. A nivel profesional, estamos en un sector con una cierta autonomía y gran importancia en el PIB, y que demanda profesionales especializados en todas las áreas transversales que lo componen, incluida la jurídica, por supuesto. Como anécdota, te puedo contar que cuando empecé en el fútbol profesional casi ningún club de primera o segunda división tenía una asesoría jurídica interna. Hoy en día todos disponen de ella. En LaLiga y en la Federación y, si me apuras, en la UEFA o en la FIFA se podían contar con los dedos de una mano los asesores jurídicos que existían. Afortunadamente, hoy no es así y todas las entidades cuentan con juristas especializados en derecho deportivo y siguen creciendo, contratando cada vez más profesionales jurídicos tanto a nivel interno como externo.

• Hay que destacar también su actividad docente en numerosas universidades y escuelas de derecho ¿Qué tipo de formación, conocimientos y habilidades considera que son esenciales para especializarse en derecho deportivo? ¿Qué consejo le daría a alguien que sueña con ser abogado en clubs deportivos, federaciones deportivas, o despachos en esta especialidad?

Saber derecho deportivo al final es saber derecho, derecho público, derecho privado, derecho nacional, derecho internacional, yo siempre aconsejo que haya siempre una buena formación jurídica de base, es decir, hay gente que se lanza a hacer un máster de derecho deportivo nada más concluir sus estudios de grado o de licenciatura, pero quizás hay que comenzar cursando un buen master de acceso a la abogacía, en donde te formen en áreas generales, y luego ir especializándote cuando tengas una base teórica y práctica adecuada. O cursar ambos a la vez, si es posible.

Es verdad que el deporte tiene sus normas específicas, pero es fundamental tener una base jurídica lo más amplia posible, porque muchas veces la solución al problema te puede venir en una norma de derecho deportivo, pero esto hay que reinterpretarlo con una norma de derecho laboral, o con una norma de derecho de la competencia, o con una norma de derecho civil o con una norma de derecho civil o de derecho constitucional o de administrativo.

Y eso a veces, si no tienes esa base jurídica adecuada de fondo, puedes estar un poco huérfano, aunque todas las opciones pueden ser válidas. También conozco muchos casos exitosos de compañeros y alumnos que cursaron directamente un Máster en Derecho Deportivo y nada más finalizarlo entraron en instituciones deportivas del mayor prestigio nacional e internacional.

No hay que olvidar que, a pesar de la especifidad y presunta “autonomía” del derecho deportivo si, por ejemplo, tengo que hacer una operación de financiación de un importante club o de una liga o de una federación, lo que necesito saber es el derecho mercantil aplicable y luego ver los requisitos específicos que puede tener la normativa deportiva sobre la que aplicarlo. Pero lo importante, en esa operación, es saber mucho del marco legal aplicable a la financiación y un poco de deportivo… También hay casos, al contrario, en lo que predomina, realmente, es el conocimiento de las normas propias federativas nacionales e internacional al no existir otra regulación aplicable. Y ahí sí ha y que saber, por supuesto mucho derecho deportivo.

Si te gusta el derecho deportivo puedes además formarte específicamente en jornadas, congresos, seminarios que organizan multitud de universidades, entidades deportivas y asociaciones. Y, por supuesto, hay muchos Cursos y Másteres especializados tanto con una perspectiva nacional como internacional para aquellos que quieran una formación más completa y adaptada a sus necesidades.

• En los últimos años, han surgido nuevas formas de consumo del deporte y nuevos formatos ¿Cuáles son los desafíos más importantes que enfrenta este sector? ¿Cómo ha observado que ha evolucionado el papel del abogado especializado en derecho deportivo en los últimos años y cómo cree que evolucionará en el futuro?

En el sector vamos hacia la digitalización y empleo de las nuevas tecnologías en todos los ámbitos de gestión. En el deporte, la fuente principal de ingresos son los derechos audiovisuales y comerciales y de patrocinio y ahora mismo estamos en un proceso de reconfiguración de todo el sistema que nos va a afectar obviamente en el día a día. Este modelo de venta y comercialización del dpeorte “tradicional”está empezando a dar síntomas de agotamiento y ahora nos vamos a ir también a nuevas plataformas, o a la creación de canales específicos, de OTTs, de nuevos modelos de actividades deportivas, etc.En la explotación comercial ahora mismo las nuevas tecnologías están obligando a reconfigurar absolutamente todo el modelo de negocio, desde el propio modelo competitivo de cada actividad y de como, por ejemplo, la tenemos que hacer más atractiva al público más joven, hasta la búsqueda de nuevas fórmulas de explotación del negocio.

Lo que nos queda es estar alerta y estudiar en todo momento. Estudiar derecho deportivo, como te he dicho, no tiene límites. Estudiar esta materia es una pasión sin límites porque realmente no tiene límites el estudio; todas las disciplinas jurídicas tienen relación con el deporte y el único límite te lo da tu propia capacidad o los deseos.